Un año hablando de Chuchas, de Penélopes, de gozos y de acosos. Tenía las nalgas cuadradas de las 8 horas diarias que me pasaba sentada en el salón “estudiando” una maestría en negocios. Sólo quería regresar a Lima y seguir con mi vida. Hablaba por Skype, Nextel y Messenger con mis amigos que no me extrañaban a mí sino a mis consejos.
- Huevona, y me dijo que le gustaba, y tiramos y es lindo… tu qué piensas? Que si no te firma es floro.
- Oye, no entiendo alucina, por qué me busca si ya le he dicho que no pasa nada? Porque le cierras la boca, pero le abres las patas.
- Quiero plata ñaña, PLATA! Qué hago? Ponte a chambear por tu cuenta vago de mierda, sino te van a seguir explotando por falto de cacumen. ANIMAL!
- Si soy tan guapo, tan inteligente, tan chistoso? No entiendo por qué no encuentro una chica bien? Porque usas bufanda, tienes gato y haces spinning. Sassy GAY friend!
Y luego claro: Puta, eres una mierda huevona. ¿Cómo me dices eso? Te maleas, cojuda. BUA BUA BUA! Arranquen llorones, que luego volverán con el rabo entre las piernas.
Entonces me dije: Este veneno, esta desfachatez, este problema, este defecto genético mío de haber nacido sin un filtro para hablar debe ser compartido. Debo saciar el ansia humana por la racionalidad. Y creé este blog que muchos toman a la ligera pero otros, sabios, reconocen su verdadero valor.
Ha pasado un año, y tengo una idea. Una idea que se cocina hace más de meses y saldrá a la luz ya pronto.
PD: Te qué carajo quieren que postee?
lunes, 22 de noviembre de 2010
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